La Consejería de Fomento y Vivienda, a través del Agencia de Obra Pública de la Junta de Andalucía (AOPJA), ha remitido hoy a los boletines oficiales y a la plataforma de contratación el anuncio y los pliegos del concurso para la terminación de las obras del tramo Renfe-Guadalmedina del Metro de Málaga. El importe base de licitación, IVA excluido, asciende a 24,75 millones de euros, para unos trabajos que tienen un plazo de ejecución de 22 meses desde la formalización del contrato. Las empresas interesadas en concurrir a esta licitación tienen de plazo límite hasta el próximo 24 de julio para presentar sus ofertas. El empleo asociado a su construcción se estima en 372 puestos de trabajo, de los que 200 son directos.
La licitación para terminar la ejecución de este contrato se produce una vez que el consejo rector de AOPJA procedió el pasado viernes 9 de junio a declarar resuelto el contrato con la anterior empresa, así como a formalizar su liquidación, después de que el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía del pasado martes autorizara a este ente público de la Consejería de Fomento y Vivienda a proceder a la extinción contractual con el anterior constructor (grupo Ortiz).
La licitación que sale a concurso público incluye tanto las unidades pendientes de ejecutar del anterior contrato, como el proyecto modificado aprobado por la AOPJA en junio de 2016 para dar cobertura a varias circunstancias sobrevenidas durante la ejecución de las obras, como la terminación de las intervenciones arqueológicas asociadas a la obra civil.
El nivel de ejecución de esta obra, antes de su suspensión en septiembre de 2015, hace algo menos de dos años, alcanzaba el 65%, incluyendo ya en dicho porcentaje el proyecto modificado. Igualmente, las actuaciones de intervención arqueológica y apeo de la muralla Nazarí descubierta durante las excavaciones en Callejones del Perchel, arrojaban un nivel de terminación del 72%, que ahora se completarán en el marco del nuevo contrato.
El tramo Renfe-Guadalmedina, que consta de 713 metros de longitud lineal y una estación, denominada Guadalmedina, localizada en la Plaza Manuel Alcántara, se desarrolla íntegramente en subterráneo. Su principal complejidad, al margen de los hallazgos arqueológicos de la muralla Nazarí, catalogada como Bien de Interés Cultural (BIC), reside en que en su trazado confluyen las dos líneas del Metro de Málaga, por lo que la Estación Guadalmedina consta de tres niveles de profundidad: el primer nivel acoge el vestíbulo y los niveles -2 y -3 albergan los andenes y vías de ambas líneas, con el mismo diseño que el Intercambiador de El Perchel, que posibilita el trasbordo de usuarios entre las dos líneas en un mismo nivel.
Los trabajos desarrollados hasta septiembre de 2015 se concentraron, principalmente, en el subtramo entre la Estación El Perchel, intercambiador en el que confluyen las líneas 1 y 2 en servicio comercial desde julio de 2014, y el principio de la Avenida de Andalucía. En este subtramo se han ejecutado ya el 80% de los módulos de pantallas (muros que delimitan linealmente el túnel y el recinto de estación), así como el 40% de la losa de cubierta del túnel y la estación, avance que ha permitido restituir y urbanizar el 44% de la extensión total del tramo, que finaliza en el Puente de Tetuán, donde tiene su origen el tramo Guadalmedina-Atarazanas, en avanzada ejecución. Igualmente, hasta la paralización de los trabajos se había excavado casi el 30% del primer nivel del túnel (nivel de vestíbulo).
En el segundo subtramo de esta actuación, que es el que discurre por la Avenida de Andalucía, desde la estación Guadalmedina y hasta el Puente de Tetuán, se habían desarrollado trabajos de reposición de servicios afectados (redes de suministro y saneamiento urbano), que restan por completar, así como la ordenación del tráfico. Por tanto, es en esta zona donde se concentran las principales actividades a acometer, pues hay que ejecutar el tramo de túnel, la excavación entre pantallas de los diferentes niveles y la posterior reposición de la urbanización. También resta por ejecutar, en el caso de la estación, la excavación de los diferentes niveles del recinto ya construido, así como la ejecución de las losas intermedias, que separan los diferentes niveles, y la reurbanización final. Finalmente, también está pendiente de construcción el acceso a la Estación Guadalmedina por la calle de Armengual de la Mota, así como su reurbanización.
La licitación de las obras de terminación del tramo Renfe-Guadalmedina, cuya adjudicación y contratación se prevé para finales del presente año, tienen una gran relevancia para la culminación de la red, pues este tramo da continuidad a las líneas 1 y 2 en servicio, y entronca con las extensiones de ambas líneas hasta el centro histórico (tramo Guadalmedina-Atarazanas) y la zona norte (prolongación hasta el Hospital Civil), que configuran la red pactada en 2013.
Además, a la licitación de la terminación del citado tramo, hay que añadir que el pasado 9 de mayo el Consejo de Gobierno declaró de interés metropolitano la prolongación de la línea 2 del metro desde Guadalmedina hasta el Hospital Civil y Materno Infantil, que junto al tramo Guadalmedina-Atarazanas, en avanzada ejecución, completan la red pendiente de ejecutar y poner en servicio, y que equivalen al 19% de la infraestructura total.
Las Líneas 1 y 2 del Metro de Málaga hasta el Intercambiador El Perchel-María Zambrano arrojaron en 2016 un volumen de 5,2 millones de viajeros transportados, un 4,4% más que en 2015 y, de acuerdo a las previsiones, la red completa arrojará 20,7 millones de usuarios.
