La Orquesta Filarmónica de Málaga continúa su temporada con un noveno programa de abono que ha logrado conquistar al público del Teatro Cervantes. Bajo la batuta del maestro alemán Alexander Merzyn, la formación ofreció un repertorio cuidadosamente seleccionado que combinó la delicadeza de Reynaldo Hahn, la intensidad de Édouard Lalo y la majestuosidad de Robert Schumann.

Un inicio elegante con Reynaldo Hahn

El concierto se abrió con la Obertura de la comedia musical Mozart de Reynaldo Hahn, una obra interpretada por primera vez por la OFM. Su carácter ligero y elegante sirvió como una cálida bienvenida a la velada, permitiendo al público adentrarse en la atmósfera refinada de la música francesa de principios del siglo XX.

Nadège Rochat deslumbra con el Concierto para violonchelo de Lalo

Uno de los momentos más esperados de la noche fue la interpretación del Concierto para violonchelo en Re menor de Édouard Lalo, en la que brilló la talentosa violonchelista suiza Nadège Rochat. Desde los primeros compases, su interpretación cautivó a los asistentes con una combinación de fuerza expresiva y sensibilidad.

El primer movimiento, Allegro maestoso, destacó por su dramatismo y riqueza melódica, con Rochat entregándose a cada frase con una intensidad que traspasaba el escenario. En el Intermezzo, la solista mostró una admirable capacidad para alternar lirismo y dinamismo, mientras que el último movimiento, un vibrante rondó, fue el broche de oro a una actuación que arrancó una ovación entusiasta del público.

Después de esta interpretación magistral, Nadège Rochat nos regaló un bis que dejó al público sin aliento: Dolcissimo de Pēteris Vasks. Su violonchelo susurró con una delicadeza infinita, llenando la sala de una emoción casi palpable. Cada nota flotaba en el aire como un suspiro, suspendiendo el tiempo por unos instantes. Fue un cierre perfecto para la primera parte de una velada inolvidable.

La fuerza evocadora de la Renana de Schumann

La segunda parte del programa estuvo dedicada a la Tercera Sinfonía de Schumann, conocida como la Renana, una de las obras más cautivadoras del repertorio romántico. Inspirada en la majestuosidad del río Rin y la cultura de Renania, esta sinfonía es una celebración de la naturaleza y la historia de la región.

La OFM, bajo la dirección precisa y enérgica de Alexander Merzyn, logró transmitir toda la riqueza expresiva de la partitura. Desde el poderoso primer movimiento, con su tema heroico y vibrante, hasta el majestuoso Feierlich, que evoca una ceremonia solemne, cada sección de la sinfonía fue interpretada con gran atención al detalle. El último movimiento, lleno de vitalidad, cerró la velada con una explosión de energía que dejó al público visiblemente emocionado.

Una noche para el recuerdo

Con este noveno programa de abono, la Orquesta Filarmónica de Málaga reafirma su excelencia interpretativa y su capacidad para emocionar al público con repertorios variados y exigentes. La combinación del talento de Nadège Rochat, la batuta inspirada de Alexander Merzyn y la entrega de la Orquesta Filarmónica de Málaga convirtió este concierto en una experiencia musical inolvidable.

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