El Índice de Producción Industrial de Andalucía registró un aumento del 11% interanual el pasado noviembre, casi el doble que a nivel nacional (5,6%), sumando tres meses de tasas positivas, tal y como se extrae del 'Observatorio Económico Semanal de la Junta de Andalucía' presentado por la Consejería de Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades al Consejo de Gobierno.
De acuerdo con el informe, ese diferencial positivo de crecimiento está sustentado en el mejor comportamiento relativo de las ramas de suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado, que crece un 35,7% en Andalucía, casi el triple que a nivel nacional (12,9%); y la industria manufacturera, con un aumento del 7,9%, 3,3 puntos más que en España (4,6%). También se incrementa el suministro de agua (2,7%), seis décimas más que en el conjunto del país (2,1%), mientras que sigue reduciéndose la industria extractiva, un -18,5%, acumulando siete meses con tasas negativas de dos dígitos.
Dentro de la industria manufacturera, sobresale por su repercusión positiva las subidas en fabricación de bebidas (27,8% interanual en noviembre), coquerías y refino de petróleo (26,3%) e industria de la alimentación (6,5%). En el lado opuesto, destacan las caídas en la fabricación de material y equipo eléctrico (-18,6%), vehículos de motor, remolques y semirremolques (-10,7%) y otro material de transporte (-12,2%), ramas que en los últimos meses se están viendo más afectadas por la falta de suministros.
En términos acumulados, entre enero y noviembre de 2021 la producción industrial en la comunidad creció un 4,5% interanual, una subida que viene explicada por el aumento de la industria manufacturera (6,3%) y del suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado (2,2% y 3,1% respectivamente). En el lado opuesto, presentan caídas la industria extractiva (-26,4%) y el suministro de agua (-0,7%).
Por otro lado, el Observatorio Económico Semanal también ha puesto de manifiesto que el número de viajeros en transporte urbano en Andalucía intensificó en noviembre su ritmo de crecimiento, casi duplicando la tasa registrada en el mes anterior y superando la media nacional. Este indicador creció, en concreto, un 68,5% interanual en ese periodo, casi el doble que en el mes anterior (36,3%) y muy por encima de la media nacional (48,7%). Este incremento es el resultado del aumento tanto del número de usuarios del autobús (63,5%) como, y más intensamente, del transporte metropolitano (125,2%).
En términos acumulados, entre enero y noviembre del pasado año el número de usuarios del transporte urbano en la comunidad ha aumentado un 20,9% respecto al mismo período del año anterior, contabilizándose 146,7 millones de personas. Esa cifra es un 35% inferior a los niveles que se registraban en 2019 (226,6 millones de usuarios hasta el mes de noviembre).
De igual modo, el transporte aéreo de viajeros mantiene su trayectoria de recuperación en el mes de diciembre, de manera más intensa que a nivel nacional, multiplicando por cuatro la cifra del mismo mes de 2020. En diciembre pasado se registraron 1.368.525 pasajeros en avión en Andalucía, cuatro veces más que en el mismo mes del año anterior (337.660 viajeros), en un contexto de crecimiento más moderado en el conjunto nacional (234,1%). Ese aumento se sustenta tanto en el tráfico aéreo interior (+386.069 usuarios) como, sobre todo, el internacional (+644.796 pasajeros). No obstante, comparado con diciembre de 2019 (1.895.807 pasajeros), el tráfico aéreo de pasajeros en la comunidad es casi un 30% inferior.
En términos acumulados, en el conjunto de 2021 se han contabilizado 13,6 millones de pasajeros en avión en Andalucía, con un aumento del 64,3% respecto al año 2020, incremento superior a la media nacional (57,8%). Comparado con 2019 (30,7 millones de pasajeros), la cifra de usuarios de avión en la región es un -55,8% inferior.
Por su parte, el tráfico aéreo de mercancías ha registrado un aumento muy moderado, un 0,8% en conjunto del año 2021 en Andalucía.
Inflación
De igual modo, el Observatorio también apunta que la tasa de inflación alcanza en diciembre pasado su nivel más alto desde 1992, destacando las subidas del precio de la electricidad y los carburantes y combustibles.
El IPC presentó en ese periodo un incremento interanual del 6,7%, dos décimas superior a la media nacional (6,5%). Destacan con los mayores aumentos vivienda (26,7%), sobre todo electricidad, gas y otros combustibles (61,3%) y transporte (11,1%), por la subida de carburantes y combustibles (24,6%), en un contexto en el que el precio del barril de petróleo Brent se situó de media en diciembre en 74,7 dólares, un 48,8% por encima del mismo mes de 2020.
La inflación subyacente, el componente más estructural de los precios de consumo, que no recoge los precios más volátiles (alimentos no elaborados y energía), fue del 2% interanual, la más elevada desde febrero de 2013, una décima inferior a la media nacional (2,1%).
